America Latina y el Caribe: 5º Curso para los Formadores de America Latina y el Caribe (Cu.Pa.F.Al)
BAÑOS, Ecuador - Del 1 al 11 de Julio se realizó en la ciudad de Baños (Ecuador) el 5º CUPAFAL con la participación de 13 cohermanos que trabajan en diferentes etapas de formación en Argentina (1), Perú- Brasil (3), Colombia (4), Ecuador (2), Haití (3) y con la coordinación del padre Gonzalo Tabares Builes, provincial de Colombia y coordinador de América Latina y el Caribe. En nombre de la administración general acompañó el padre Jorge Enrique González y la segunda semana nos acompañó también el padre Luiz Augusto Stefani, superior de la delegación Perú-Brasil. Los dos últimos días contamos también con la presencia del superior general , el padre Santino Brembilla, y el ecónomo general, el padre Jim Brady.
El objetivo era hacer una relectura de la misión formativa para comprender y acompañar mejor a nuestros candidatos en las diferentes etapas de formación en esta región del mundo. Seguimos la metodología VER-ILUMINAR-ACTUAR-CELEBRAR.
Durante la primera semana, para la primera etapa (VER), contamos con tres conferencistas ecuatorianos que nos ayudaron a acercarnos a la realidad social, religiosa y psicológica-familiar de los jóvenes hoy en América Latina y comprender mejor la complejidad del ambiente en el que se mueven.
Ya en la segunda semana (de lunes a miércoles) a través de un día de retiro personal y del compartir en grupos, buscamos ILUMINAR cómo acompañar nuestros candidatos a la LUZ del Evangelio, del documento de Aparecida, la Evangelii Gaudium y de la congregación: La Ratio Vol II y algunas cartas de los superiores generales referentes a la formación.
Terminamos nuestro encuentro (jueves y viernes en la mañana) discerniendo juntos algunas propuestas concretas (ACTUAR) para todos los superiores de América Latina y el Caribe (COORLAC) que se reunirán inmediatamente después de nuestro encuentro (14-15 de Julio).
Fueron dos semanas intensas y muy significativas para todos nosotros porque tuvimos muchos momentos para compartir y construir la fraternidad misionera entre nosotros. Tuvimos trabajos en grupo, momentos de oración y de celebración según las diferentes culturas representadas (Cohermanos de América Latina y el Caribe, Indonesia, India). También tuvimos la oportunidad de realizar algunas actividades recreativas: paseo a Quito, baño en las aguas termales, pequeña peregrinación a una imagen de la Virgen en medio de una montaña, visita a algunos lugares turísticos de este lugar encantador. Durante este tiempo recordamos agradecidos a los cohermanos de Francia, Holanda, Italia, España y en los últimos años la República Democrática del Congo, Indonesia y la India que han venido a fortalecer la misión montfortiana en este continente.
Silencioso y muy discreto nos acompañó durante todo el tiempo el Volcán Tungurahua –amado y temido a la vez pues es un volcán activo- que sin embargo nos permitió admirar su belleza en algunas ocasiones.
Damos gracias Dios por este tiempo de gracia que renovó nuestras energías para continuar nuestra misión formativa con muchos más elementos de juicio y sobre todo sintiendo el deseo creciente de continuar trabajando por la unificación de nuestros criterios y planes formativos en América Latina y el Caribe y en apertura a la realidad de toda la congregación.
El objetivo era hacer una relectura de la misión formativa para comprender y acompañar mejor a nuestros candidatos en las diferentes etapas de formación en esta región del mundo. Seguimos la metodología VER-ILUMINAR-ACTUAR-CELEBRAR.
Durante la primera semana, para la primera etapa (VER), contamos con tres conferencistas ecuatorianos que nos ayudaron a acercarnos a la realidad social, religiosa y psicológica-familiar de los jóvenes hoy en América Latina y comprender mejor la complejidad del ambiente en el que se mueven.
Ya en la segunda semana (de lunes a miércoles) a través de un día de retiro personal y del compartir en grupos, buscamos ILUMINAR cómo acompañar nuestros candidatos a la LUZ del Evangelio, del documento de Aparecida, la Evangelii Gaudium y de la congregación: La Ratio Vol II y algunas cartas de los superiores generales referentes a la formación.
Terminamos nuestro encuentro (jueves y viernes en la mañana) discerniendo juntos algunas propuestas concretas (ACTUAR) para todos los superiores de América Latina y el Caribe (COORLAC) que se reunirán inmediatamente después de nuestro encuentro (14-15 de Julio).
Fueron dos semanas intensas y muy significativas para todos nosotros porque tuvimos muchos momentos para compartir y construir la fraternidad misionera entre nosotros. Tuvimos trabajos en grupo, momentos de oración y de celebración según las diferentes culturas representadas (Cohermanos de América Latina y el Caribe, Indonesia, India). También tuvimos la oportunidad de realizar algunas actividades recreativas: paseo a Quito, baño en las aguas termales, pequeña peregrinación a una imagen de la Virgen en medio de una montaña, visita a algunos lugares turísticos de este lugar encantador. Durante este tiempo recordamos agradecidos a los cohermanos de Francia, Holanda, Italia, España y en los últimos años la República Democrática del Congo, Indonesia y la India que han venido a fortalecer la misión montfortiana en este continente.
Silencioso y muy discreto nos acompañó durante todo el tiempo el Volcán Tungurahua –amado y temido a la vez pues es un volcán activo- que sin embargo nos permitió admirar su belleza en algunas ocasiones.
Damos gracias Dios por este tiempo de gracia que renovó nuestras energías para continuar nuestra misión formativa con muchos más elementos de juicio y sobre todo sintiendo el deseo creciente de continuar trabajando por la unificación de nuestros criterios y planes formativos en América Latina y el Caribe y en apertura a la realidad de toda la congregación.
El objetivo era hacer una relectura de la misión formativa para comprender y acompañar mejor a nuestros candidatos en las diferentes etapas de formación en esta región del mundo. Seguimos la metodología VER-ILUMINAR-ACTUAR-CELEBRAR.
Durante la primera semana, para la primera etapa (VER), contamos con tres conferencistas ecuatorianos que nos ayudaron a acercarnos a la realidad social, religiosa y psicológica-familiar de los jóvenes hoy en América Latina y comprender mejor la complejidad del ambiente en el que se mueven.
Ya en la segunda semana (de lunes a miércoles) a través de un día de retiro personal y del compartir en grupos, buscamos ILUMINAR cómo acompañar nuestros candidatos a la LUZ del Evangelio, del documento de Aparecida, la Evangelii Gaudium y de la congregación: La Ratio Vol II y algunas cartas de los superiores generales referentes a la formación.
Terminamos nuestro encuentro (jueves y viernes en la mañana) discerniendo juntos algunas propuestas concretas (ACTUAR) para todos los superiores de América Latina y el Caribe (COORLAC) que se reunirán inmediatamente después de nuestro encuentro (14-15 de Julio).
Fueron dos semanas intensas y muy significativas para todos nosotros porque tuvimos muchos momentos para compartir y construir la fraternidad misionera entre nosotros. Tuvimos trabajos en grupo, momentos de oración y de celebración según las diferentes culturas representadas (Cohermanos de América Latina y el Caribe, Indonesia, India). También tuvimos la oportunidad de realizar algunas actividades recreativas: paseo a Quito, baño en las aguas termales, pequeña peregrinación a una imagen de la Virgen en medio de una montaña, visita a algunos lugares turísticos de este lugar encantador. Durante este tiempo recordamos agradecidos a los cohermanos de Francia, Holanda, Italia, España y en los últimos años la República Democrática del Congo, Indonesia y la India que han venido a fortalecer la misión montfortiana en este continente.
Silencioso y muy discreto nos acompañó durante todo el tiempo el Volcán Tungurahua –amado y temido a la vez pues es un volcán activo- que sin embargo nos permitió admirar su belleza en algunas ocasiones.
Damos gracias Dios por este tiempo de gracia que renovó nuestras energías para continuar nuestra misión formativa con muchos más elementos de juicio y sobre todo sintiendo el deseo creciente de continuar trabajando por la unificación de nuestros criterios y planes formativos en América Latina y el Caribe y en apertura a la realidad de toda la congregación.
-Jorge Enrique GONZALEZ V. smm
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